Se acabaron los tiempos en los que un divorcio era asumido como un fracaso personal. Ahora, muchas mujeres organizan fiestas de 'despedida de casada' como ritual hacia una nueva etapa, que tiene la libertad de la juventud y la sensatez de la madurez.
"En una despedida de casada están más relajadas que en una de soltera porque no vienen con las cuñadas, las primas o las suegras como ocurre cuando se van a casar", afirma Oscar Reina, dueño de Reina por un Día, un empresa que organiza fiestas de todo tipo. En este tipo de celebraciones, las reuniones son más pequeñas. Cinco o seis amigas cercanas son suficientes para divertirse en una noche tan especial. "La ex-novia quiere devolver a sus íntimas todo lo que le han dado y sorprenderlas", comenta Reina.
Y es que el secreto de que estas festividades triunfen es que es la propia protagonista la que las organiza. Son las ex-esposas, y no las amigas, las encargadas de organizar una noche según sus propios gustos. Una manera segura de acertar. "Si han tenido un 'boy' en tu despedida, quieren algo totalmente diferente y piden un 'drag queen', comenta el empresario. Las 'beauty party' con sesiones de belleza y 'spa' son de los packs más demandados de la actualidad.
No significa que estos procesos dolorosos de separación se hayan frivolizado. Todo lo contrario. La ruptura ha variado hacia un significado mucho más positivo, dejando de ser un trauma para ser una liberación. Reunir a un grupo de amigas para una cena íntima, un 'show' un poco más especial o una fiesta temática solo para chicas son una forma de apoyar y consolar a la recién separada. Y, por supuesto, de pasarlo bien.
Los divorcios: un nuevo nicho de mercado
Las empresas de fiestas y espectáculos intentan abarcar un mercado nuevo y en crecimiento: el de los divorcios. Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el número de separaciones creció un 5,57 por ciento en 2014, año en el que se produjeron 100.746 rupturas. La recuperación económica y las facilidades administrativas que otorga el divorcio exprés podrían ser las causas de este aumento de separaciones, ya que los problemas económicos han podido frenar la disolución de los matrimonios durante la crisis.
Las españolas comienzan su 'nueva soltería' a los 42,8 años de media, mientras ellos deciden romper con 45,3 . Esta nueva situación tiene lo mejor de cada etapa vital. En este momento, se recupera la libertad de los 20 años con la experiencia acumulada de los 40. Mujeres como Melanie Griffith o Sandra Bullock demuestran que se puede disfrutar de la soltería más allá de los 50.
Además, a los blancos e inmaculados vestidos de boda les ha salido un competidor: los trajes de divorciada. El diseñador Nicolas Aujula lanzó el pasado julio un vestido satén verde, considerado el color de la esperanza, solo para mujeres en trámites de separación.
Cenas con espectáculo, reuniones íntimas de amigas, un 'tuppersex' o una tarde 'beauty' con tratamientos estéticos son los planes que las clientas suelen pedir a empresas como Cóctel Original u Olé Cabaret. Todo vale para recordar que las parejas pueden 'ser felices y comer perdices' también por separado.
